Las piscinas de vinil no son realmente las preferidas en la Florida, pero pueden resultar una alternativa muy interesante para algunos que requiere de una solución rápida y económica.

La clave para que quede bien parece estar en dos cosas: preparar bien el lugar donde va la piscina, que tenga las dimensiones y requerimientos adecuados; y luego extender el vinil de manera que quede sin arrugas ni pliegues. Aunque este video está en portugués, puede darnos una idea muy clara de lo que hay que hacer y lo que se puede lograr.

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